Declaración de DPLF sobre los recientes acontecimientos al interior de la comunidad de derechos humanos en relación con un ambiente profesional seguro

Como organización comprometida en promover el respeto de los derechos humanos, la Junta Directiva y el personal de la Fundación para el Debido Proceso (DPLF) apoyamos de manera inequívoca los derechos de las mujeres y el derecho a gozar de un ambiente libre de acoso sexual, particularmente en nuestro entorno y en los de nuestras colegas y aliadas en toda la región. Al contar con un liderazgo femenino y una mayoría de mujeres en nuestro personal, este es un asunto de particular importancia en DPLF, y estamos por ello comprometidas y comprometidos con garantizar un ambiente de trabajo colectivo, en el que todas las personas sean tratadas con respeto y dignidad.

Valoramos las contribuciones hechas por innumerables mujeres al movimiento de derechos humanos, particularmente en América Latina, donde desarrollamos nuestra labor. Reconocemos que las mujeres continúan enfrentando discriminación y hostigamiento sexual de manera sutil y evidente en la sociedad y hasta en nuestro movimiento. Cuando este tipo de actos invaden nuestros propios espacios de trabajo y nuestra comunidad, todas y todos somos responsables de apoyar a aquellas afectadas para asegurar su bienestar y seguridad.

Teniendo en cuenta las revelaciones hechas públicas por el movimiento #MeTooActivistasMexico, afirmamos enfáticamente que los valores de nuestra organización están radicalmente opuestos a toda forma de hostigamiento y discriminación basada en género. DPLF no tolera, y condena, toda conducta inapropiada por cualquier persona asociada con nuestra organización.

Agradecemos la valentía y convicción de las mujeres que se han pronunciado, y reafirmamos los derechos de todas a vivir y trabajar libres de discriminación y hostigamiento.

 

La Junta Directiva y el personal de DPLF.